Buenos Aires, 19 de junio (EFE).- Este miércoles, el Gobierno argentino hizo pública su decisión de reducir a la mitad el número de productos que requieren la presentación de declaraciones juradas para poder ser exportados, con el objetivo de simplificar las operaciones de comercio exterior.

El portavoz gubernamental, Manuel Adorni, anunció en una conferencia de prensa que “a partir de hoy se van a reducir a la mitad la cantidad de productos que deben presentar declaraciones juradas para exportar”.

Entre los productos que dejarán de estar sujetos a este requisito se encuentran las lentejas, los garbanzos, las judías, los guisantes, el arroz, los cacahuetes, el maíz y el salvado de trigo. Adorni señaló que esta decisión elimina “una traba burocrática que la política le imponía injustamente” a los productores.

Esta medida se inscribe en el marco del Decreto N° 70, emitido el 20 de diciembre, cuyo propósito es flexibilizar los plazos de exportación, reducir costos operativos y administrativos, y evitar sanciones en caso de incumplimientos.

De acuerdo con información de la Fundación Libertad, un organismo dedicado a la investigación en políticas públicas, las pequeñas y medianas empresas argentinas gastan alrededor de 900 horas al año en la gestión de impuestos. La administración de Javier Milei ha anulado más de 75 regulaciones hasta la fecha, subrayó Adorni.

“Queremos que los productores sean cada vez más libres. Queremos que cada productor decida qué hacer con la riqueza que genera sin que el Estado decida por él”, afirmó el portavoz del Gobierno.

Esta estrategia busca simplificar la normativa, eliminar la burocracia en el sector, fomentar una competencia justa, aumentar las exportaciones, y mejorar la eficiencia en el uso de los recursos estatales, lo que resultará en menores costos administrativos para el sector privado.

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