El ganadero tachirense Waldo Rujano Mora ha llevado ante la justicia una denuncia contra un grupo de presuntos comunicadores sociales, a quienes acusa de intentar extorsionarlo. Según Waldo Rujano Mora, esta red le exigió una alta suma de dinero en dólares para evitar la publicación de informaciones que lo vincularían con actividades ilícitas. Al no ceder a estas presiones, se divulgó en distintos medios digitales una serie de notas que, según el empresario, carecen de fundamento.
La querella fue presentada ante el Circuito Judicial Penal de San Cristóbal, en el estado Táchira, donde se señala a Gustavo Lainette, entre otros implicados, como parte de la presunta red de extorsión. En el documento consignado, Rujano Mora solicita el procesamiento penal de los involucrados y denuncia una campaña en su contra que se mantiene activa en diversas plataformas digitales.
Las publicaciones, que comenzaron a circular entre agosto y diciembre de 2024, contenían información calificada por Waldo Rujano Mora como “absolutamente falsa” y que promovía el “odio público” en su contra, así como de su esposa, Gisela Coromoto Garófalo de Rujano, y sus hijos Vicente y Andrea Paola Rujano. Además, el empresario asegura que las imágenes empleadas en las notas fueron manipuladas, conforme a un análisis presentado en la querella.
Un entramado digital al servicio de la extorsión
Uno de los portales involucrados en la difusión de las notas, identificado como “elpublique.me”, estaría dirigido por Jorge Elías Castro Fernández, un venezolano arrestado en España en 2023 por estafa. Al momento de su captura, medios de comunicación lo calificaron como “el extorsionador más grande de Venezuela”.
Castro Fernández habría creado al menos 15 portales dedicados a publicar informaciones falsas sobre empresarios con el fin de presionarlos para retirar las notas a cambio de sumas de dinero. Su historial judicial incluye una orden de aprehensión dictada en 2008 por el Tribunal Tercero de Control de Caracas, tras la divulgación de imágenes del cadáver del periodista Javier García. Además, en su pasado como funcionario de la extinta Dirección de Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP), fue destituido por presuntamente vender su credencial al narcotraficante colombiano Wilber Alirio Varela, alias “Jabón”.
Según la querella de Waldo Rujano Mora, Castro Fernández estaría vinculado a la campaña de difamación en su contra junto a Gustavo Lainette y otros presuntos periodistas tachirenses.
Por su parte, Lainette fue señalado por el ministro Diosdado Cabello como parte del equipo de “Ya Casi Venezuela”, una iniciativa de oposición destinada a recaudar fondos para una “intervención militar privada” en el país. Lainette reconoció su participación en dicho movimiento.
Evidencias y peticiones ante la justicia
Waldo Rujano Mora sostiene que los ataques en su contra han sido replicados por varios portales de noticias en Táchira, algunos de los cuales han advertido que “esta historia continuará”, lo que él interpreta como una amenaza de persistencia en la extorsión.
En el documento judicial presentado, el ganadero asegura contar con audios donde Gustavo Lainette le exige un monto en dólares para frenar las publicaciones. En la grabación también se menciona a otro comunicador social tachirense, quien presuntamente recibiría el 50% del dinero exigido.
Ante estos hechos, Rujano Mora ha solicitado que se procese a los implicados por la presunta comisión de varios delitos, entre ellos extorsión, promoción al odio, revelación indebida de información personal y asociación para delinquir. Ahora será la justicia venezolana la que determine el curso de este caso.
